La Dinámica Grupal: Los grupos y su contribución al desarrollo colectivo e individual

Introducción

Individuos, los principales entes por los que se conforma la sociedad y sus diferentes matices. Los humanos no podemos vivir sin relacionarnos y unirnos a otros individuos para comunicarnos, divertirnos, aprender, convivir. Estamos en relación constante los unos con los otros, esto permite conformar uno los escalones principales de la sociedad, los llamados “grupos”.

Los grupos se conforman por un mínimo de dos personas y un máximo determinado por el tipo de grupo conformado. Bien podrían ser ilimitado, o, limitado a una cantidad bastante amplia. Aquí es cuando nos hacemos distintas interrogantes, ¿Cómo es ese manejo interno de los grupos, su dinámica? ¿Las personas pueden crecer de manera individual y al mismo tiempo el grupo determinado? ¿Tienen los grupos estrategias para su desenvolvimiento? ¿Pueden los miembros de un grupo auto-liderarse y a la par tener un líder grupal?

Cada una de estas interrogantes nos hace cuestionarnos sobre el correcto funcionamiento de los grupos, sobre nuestro desempeño, aportaciones y crecimiento individual y colectivo en los mismos.

Es por esta razón que durante el desarrollo de este escrito estaremos analizando y exponiendo de manera objetiva las respuestas a estas cuestionantes en relación a los grupos y su dinámica. Al final se expondrá una explicación aplicando cada uno de los conceptos abordados a mi caso personal.

La dinámica de los grupos: conceptos claves para su entendimiento

Grupo. Buscando su concepto podemos apreciar que el mismo varía de acuerdo con la disciplina, al autor y su contexto. Georg Simmel, filósofo y sociólogo alemán, describe al grupo como “una constelación de individuos, que se unen por una conexión común”; para Kurt Lewin, psicólogo y filósofo alemán, el grupo es “una suma de individuos, que comparten un objetivo en común y que interactúan entre sí para lograrlo”.

Es decir, una unión de personas con ciertos objetivos, planteamientos, necesidades, propósitos iguales, o por lo menos encaminados en el mismo carril.

Entonces, teniendo objetivos en común, ¿las personas en los grupos se comportan todas de la misma manera?, mi respuesta ante esta interrogante es un rotundo no.

Ni siquiera los hermanos, criados todos bajo un mismo techo tienen los mismos comportamientos. Tendrán algunos accionares iguales, eso si, mas no poseen la misma personalidad ni conducta.

Lo mismo se aplica a los individuos que conforman los distintos grupos. Cada uno posee habilidades, destrezas, comportamientos y motivaciones diferentes, que propician a la creación de una identidad grupal que los diferencien de otros grupos. He aquí donde entra en juego la “Dinámica de grupo”.

Esta última se encarga de estudiar el comportamiento, las relaciones, desarrollo y crecimiento tanto de las personas de manera individual dentro del grupo como colectivamente, es decir, el grupo en su totalidad como un ente.  Todo esto en busca de mejorar el rendimiento del grupo en la generalidad de sus dimensiones.

Entendiendo esta “dinámica” que se va haciendo presente en los grupos desde el momento de su formación, se logra realizar un análisis exhaustivo que conlleva a la toma de decisiones positivas para el grupo y sus miembros, que permite cumplir los objetivos de ambos y el crecimiento colectivo.

Con este entendimiento de las características que presentan tanto los miembros como el grupo, entonces, se inicia la planificación de estrategias que permitan llevar al grupo y sus miembros a un nivel más elevado de entendimiento y cohesión.

Las estrategias de desarrollo grupal vienen implicando los accionares y planes que llevaran a los miembros a cumplir adecuadamente determinadas tareas u objetivos.

Conlleva el aumento de las habilidades de manejo de asignaciones, el mejoramiento del ambiente, la capacitación y la integración que tenga cada miembro con su rol especifico dentro del grupo. Se debe delegar funciones, pues de esta manera se logra obtener un sentido de pertenencia y funcionalidad, después de todo ¿a quien no le gusta sentirse valioso y que sus conocimientos son útiles?

Un punto importante siempre viene siendo que cada individuo aprenda a aprovechar sus fortalezas, que trabaje con ellas, transformándolas en partes valiosas de la identidad grupal. De este modo se crece y desarrolla la colectividad y dentro de ella la individualidad de cada ser que pertenece a esta.

Lo que nos lleva a nuestro siguiente enfoque y al entendimiento de dos conceptos claves: El desarrollo personal y el autoliderazgo.

Aun estando dentro de un colectivo, un grupo, siempre estamos en constante desarrollo, obteniendo conocimientos y destrezas que antes no se encontraban en nuestra pestaña de habilidades. De las cuales se obtiene un beneficio mutuo, tanto para el individuo en sí, como para el grupo como persona.

A parte de estas habilidades, cada individuo puede desarrollarse sin dejar de pertenecer al grupo, o mejor, permitirse escalar dentro del mismo. Entrando consigo “Las estrategias de desarrollo personal”

Las estrategias personales son los pasos que llevamos a cabo y de manera organizada para cumplir nuestras metas, crecer profesionalmente, conseguir realizar nuestros propósitos.

Descubrir quienes somos, que nos motiva, ir adquiriendo nuevos conocimientos, mejorar la salud física y mental. Por más cliché que aparenten estas estrategias son fundamentales para conseguir un desarrollo pleno en cualquier ámbito de nuestra vida. Si no sabemos quiénes, que queremos o que podemos aportar, ¿Cómo puedo mejorar?

El autoliderazgo, por su parte es la capacidad para lograr guiarnos y cumplir con esas metas y estrategias para el desarrollo personal. Dentro del grupo, las personas con esta capacidad latente son grandiosos, pues su eficiencia y productiva es mayor a alguien que constantemente (y por obvias razones) hay que tenerle pendiente sus obligaciones. Tiene muy conscientes sus fortalezas y debilidades, siempre en busca de alcanzar nuevos niveles, y desentrañar esas debilidades.

El liderazgo, implica guía, motivación, inspiración, y toma de decisiones en busca de un bien mayor. El líder en un grupo siempre está al pendiente de sus miembros y en vista de que se cumplan los objetivos comunes.

Para mi alguien que no puede auto-liderarse tampoco haría un buen trabajo dirigiendo a los demás. Si no podemos organizar nuestros pensamientos, llevar en claro nuestros propósitos, cuando se junten más de una visión, una voz, metas, ¿Cómo lo llevaríamos? Fatal, cierto.

Teniendo pendiente que aun teniendo la capacidad de auto-liderarnos en el grupo (trabajar las asignaciones sin que el líder deba estar sobre nosotros), hay que tener cuenta de no romper forzadamente con los roles que se nos han impuesto, es decir, adueñarnos el papel de líder sin que se nos haga el respectivo nombramiento por todas las actitudes y capacidades antes demostradas.

Lo que nos lleva a nuestro último punto “Las 10 dimensiones del crecimiento individual/colectivo”. También llamadas las 10 C´: Creer, crear, comunicar, compartir, comprometer, colaborar, contribuir, criticar, conservar, cohesionar. Son valores y habilidades primordiales que se deben obtener y fomentar en los grupos e individualmente para alcanzar adecuadamente las metas y objetivos.

·       Creer: En uno mismo ayuda a superar obstáculos, en los demás invita a la cooperación.

·       Crear: Nuevos proyectos, soluciones, ideas innovadoras que permitan un cambio positivo.

·       Comunicar: Una comunicación clara y efectiva dentro de los miembros es fundamental. Evita conflictos y confusiones y promueve el mejoramiento.

·       Compartir: Los conocimientos, recursos, experiencias, desarrolla un ambiente agradable, donde la solidaridad es lo primordial y los lazos entre los individuos es más fuerte.

·       Comprometer: Con los objetivos y tareas asignadas contribuye al éxito colectivo.

·       Colaborar: Trabajar juntos, aprovechando las habilidades individuales.

·       Contribuir: Con habilidades, tiempo, o apoyo, aportando valor significativo al colectivo.

·       Criticar: Implica evaluar las ideas, proyectos, acciones de manera constructiva, obteniendo de ello un mejoramiento o aprendizaje para un futuro.

·       Conservar: Valorando y protegiendo los logros del grupo así como su memoria.

·       Cohesionar: Implica la unión grupal, mediante el respeto, confianza, solidaridad, compañerismo, que les permita continuar unidos en un ambiente favorable para todos.

Entendiendo cada uno de estos conceptos claves, podemos aplicarlos a cada caso particular. Pondré mi ejemplo, en base a las siguientes interrogantes.

Ø  ¿Cuál sería mi estrategia de desarrollo personal a partir de mi graduación? Personalmente, intento obtener buenas bases de conocimiento en base a la carrera que estudio (Psicología educativa), es decir, no solo quedarme con lo enseñado por la universidad que solo es teórico y nada práctico. Intento realizar cursos o talleres que afiancen mis conocimientos y obtener nuevos. Para que a partir de mi graduación las capacidades y habilidades que pueda aportar a determinado grupo donde logre insertarme sean sólidas.

Ø  Cómo pretendo auto-liderarme: Iniciando el fomento de hábitos pequeños y significativos, y continuando con el desarrollo de metas más complejas. Conseguir caminar un rato por las tardes y mantener saludable mi cuerpo, realizar mis asignaciones universitarias, aprender un idioma o leer una página de un libro. Son cosas pequeñas y sencillas que para mí marcan un camino en mi vida y un paso para obtener la capacidad de auto-liderarme.

Ø  El tipo de grupo laboral donde me gustaría participar una vez graduada: Un grupo donde la enseñanza y el aprendizaje sean fundamentales, donde pueda poner en práctica los conocimientos que estoy obteniendo en esta etapa universitaria. Donde pueda influir y ayudar a los jóvenes que vienen subiendo en nuestra sociedad.

Ø  Cómo pretendo integrarme al desarrollo estratégico del grupo: Conociendo a los miembros del grupo, comunicándome con ellos de manera efectiva y colaborando para el cumplimiento de las asignaciones.

Ø  Cómo considero que puedo participar en el liderazgo de mi grupo laboral: Aportando ideas para las soluciones de problemas o para mejorar un área específica. Colaborando con mis compañeros en los proyectos o cumplimiento de metas. De modo que podamos avanzar todos unidos y crecer como un grupo.

Ø  Cómo considero que se manifiestan las 10´Cs en los conceptos abordados: Estas 10 dimensiones están presentes desde el momento uno en que decidimos formar un grupo con otros individuos, para lograr el crecimiento de este nuevo colectivo pero también un crecimiento interno de cada individuo que lo conforma. En otras palabras para la colaboración, unión y fortalecimiento del mismo.

Conclusión

Resumiendo, la dinámica de grupo es un proceso complejo pero interesante que influye y nos permite entender el desarrollo individual y colectivo dentro del grupo.

Estos últimos al unir a personas con metas y objetivos en común se transforman en un espacia de aprendizaje sustancial, donde se entrelazan las habilidades, capacidades, personalidades y motivaciones únicas de cada individuo, convirtiéndolo en un espacio rico en experiencias variadas.

A medida que los grupos evolucionan sus componentes formadores lo hacen junto a él, influyéndose mutuamente y creando esa identidad grupal que los vuelve único ante otros grupos de iguales.

La comprensión y observación de esta dinámica interna y externa de los mismos, permite tomar las decisiones más acertadas e informadas para el beneficio mutuo.

Finalmente, la dinámica de grupo no solo le da un impulso al colectivo que se está manejando ahí, sino que de igual manera nutre al individuo como un solo ente enseñándole a liderar a otros y a liderarse a sí mismo para conseguir sus propósitos.

Autora: Luz Alba Parra

21-epss-5-001

Referencias

Write a comment ...

Write a comment ...